Como podeís observar, el horno está construido contra la pared de una casita de ladrillo pintado que usan como almacén.
La base, la hicimos de piedras de granito que había amontonadas en la finca, de las que sobraron de la reconstrucción de la casa principal.
El horno encima está sobre un suelo de ladrillo refractario para que nos sea sencillo meter y sacar las bandejas de pan, pizza..., y esta hecho con Cob, que es una mezcla de arena, arcilla y paja.
La puerta es de madera con un refuerzo metalico en la cara interior.
Y esa tela que se ve, medio quemada encima, es lana y mantas que estuvieron usando mientras el horno no estaba terminado, porque perdía mucho calor.
Al ser un material sensible a la lluvia, nos vemos casi obligados, al menos en Galicia, a cubrir el horno con un techo. En este caso nos hemos aprovechado del edificio ya existente para lanzar un tejadito con solo dos columnas de castaño delante del horno.
Como el horno estába muy seco, tenemos que hacer barbotina (clay slip en inglés), que es una arcilla con textura de chocolate a la taza, para poder añadir masa a la que ya hay y darle volumen así, a nuestro horno.
Y después, a poner fuertes las manos, sin perder la sensibilidad, ni la intuicion... a esculpir!
...y después de unas horas de embadurnamiento amistoso, un último vistazo...
Y voila,
Y hasta la proxima visita en la que haremos, el reboco y el techo verde;)
hola Javier Ovejero,me pasó mi sobrina tu enlace y
ResponderEliminarme gustaría conocerte,yo he trabajado con madera 1/2 vida y ahora me dedico al adobe,cob, paja,etc.
Vivo en Betanzos y creo que estas cerca de Santiago,
podría visitarte después del verano?,en otoño,digo.
Me ha gustado la simpleza de tu horno y me suena bastante tu nombre,el mundo es redondo,será que ya hemos coincidido antes?