Acabando el Taller

Por fin el taller está casi funcional, a la espera del enlucido final, y la instalación eléctrica.
En mi último post, habíamos llegado a avanzar la parte del gallinero, con la idea de aprovechar esa zona como cocina-galería.

 

Aprovechando la pared de ladrillo del gallinero para hacer unas zapatas corridas de hormigón, donde reposar las vigas del suelo y la futura estufa de leña. Lo mismo al fondo, contra la pared de bloque, en este caso para sostener un banco de cob.

Enlazamos el cimiento de piedra donde estaba el muro de ladrillo antes, esa esquinita que veis mojada

Dani, y delante de él, el esqueleto de la estufa, con la parte superior de una cocina de hierro vieja que encontré tirada ahí mismo, en el gallinero.

Merecido descanso de la cuadrilla, después de poner las lonas en el tejado, y el velux reciclado.
La columna de la izquierda es de cerezo, la del centro de roble y la de la derecha de castaño.

Encajando los cristales con la motosierra, en la columna.
Ya podeis ver algo de cob.

Aquí podéis ver un despliegue de reciclaje, para pileta, una olla vieja adaptada con su rebosadero y todo :) , La puerta de la estufa es una vieja puerta de horno que encontré en un vertedero ilegal. La< maceta  y el bidón rojo son como moldes para dejar unos estantes calientes para secar la leña.

Como cada cristal es de una medida diferente, el muro va a quedar escalonado.

 

Arriba un banquito de madera, orientado al sol, y pegadito a la estufa.

Ese bidón azul agujereado que veís encima de la estufa, es un intercambiador de calor humo-aire. Va acoplado al tiro de la estufa, de modo que el humo calentará mucho los agujeros, que serán tubos de metal sellados, or rozamiento.
La idea, además de aumentar la superficie de contacto para calentar el aire, es hacer circular ese aire con un ventilador, haciendo un circuito entre el taller y la cocina, calentando ambos lo antes posible.

Llega el momento de revocar,  vamos a darle 2 capas, la primera del mismo material, pero más fino, para lo que usamos unos cedazos de malla de metal de 2mm. Le añadimos también fibra, estilo paja muy fina o semillas de diente de león. Y la aplicamos con las manos o con paleta, pero es mejor que nos quede algo rugosa.
aprovechamos con esta capa para arreglar desperfectos, uniones con otros elementos...

Antes del revoco también quemamos con un soplete las pajas, y las rematamos con unas tijeras.

Las únicas paredes que estan secas son a las que podemos empezar a aplicarles la segunda capa de revoco, ya que de otro modo tardarían más en secar y habría retraccione, con sus consiguientes grietas.
La puerta verde es una donación de mi amiga Anuk, adaptada al hueco y con dos cristales reciclados.
La mayor parte de las botellas de cristal estaban en la casa, apiladas bajo el lavadero.
Lulo, de Acabados Naturales, nos hizo el favor de venir una tarde a enseñarnos a preparar un mortero de arcilla de Kaolín con agua de cal, y nos hizo una muestra de aplicación al lado de la ventana. El parche rojo es aplicandole pigmento mineral color terracota, disuelto en agua de cal, y aplicado al fresco.
Ahora si que hay que esperar para seguir.

 Abrazos a todas!!!